Historia de los Medios de Comunicación en TRUJILLO
Foto referencial: noticiasnorte.com
Resumen
Fuente: IDENTIDAD HISTÓRICA DEL PERIODISMO DE LA LIBERTAD (Segundo J. Llanos-Horna en la PUCP. 18/5/2007)
Es imposible disociar históricamente al Periodismo de los Medios de Comunicación Social. La imprenta prohijó al Periodismo Escrito desde mediados del siglo XV, precediendo al Audiovisual que comienza con el Radiofónico, continúa con el Cinematográfico y el Televisivo hasta que los ordenadores electrónicos y la telemática nos insertan en las modalidades cibernéticas.
En Trujillo – nos dice el etnohistoriador Jorge Cevallos Quiñones, confirmando la referencia de Alfredo Larco Herrera – la primera imprenta fue adquirida por el Cabildo el 4 de febrero de 1823. Exploraciones personales me permiten precisar, por otra parte, que a mediados del siglo XIX comenzaron las transmisiones en onda corta de Radio Trujillo y que las primeras señales de televisión se sintonizaron el 15 de junio de 1962, a través de una antena repetidora de Panamericana, siguiendo – desde el 17 de mayo de 1963 – las emisiones de América Televisión, desde la primera planta local.
El sistema satelital complementando con las microondas permitió que Televisión Nacional del Perú , la emisora del Estado, ingrese a Trujillo en 1986; Global TV y Andina TV, en 1989; y Frecuencia Latina, en 1990. Actualmente, pasan de medio centenar las radioemisoras e, incluido el cable, se recepcionan señales de todos los canales de Lima y funcionan – también con programas periodísticos- no menos de diez estaciones televisivas locales y/o regionales..
Me propongo, sin embargo, intentar hoy una brevísima historia del Medio impreso y, por tanto, de la prensa trujillana y liberteña.
Desde la visión del maestro Raúl Porras Barrenechea, dr distingue, en torno a la forjación de la República del Perú, un Periodismo Patriótico o Libertario, anterior a la proclamación de la Independencia, y otro – igualmente agitado por la idea y el sentimiento de Patria y Libertad – que identificaremos, genéricamente, como Periodismo Prerrepublicano, el mismo que se manifiesta durante la gesta emancipadora y los albores de la República. Los territorios de la Región La Libertad - y más concretamente su capital, Trujillo – se honran en haber sido cuna y hogar de un Periodismo, a la vez, Patriótico, Libertario y Republicano. A éste habrá de seguir, ya entrado el siglo XX, una prístina modalidad ideológico-proselitista y reivindicativa..
Pero, ya a lo largo del Estado Republicano - es decir, en los siglos XIX y XX - Trujillo anidó a otras publicaciones emblemáticas como fueron los casos de la revista “Primavera” y el diario “La Industria”, fundadas por Raúl Edmundo Haya Cárdenas, padre de Víctor Raúl Haya de la Torre, y el diario “El Norte”,que congregó, en torno a Antenor Orrego, al irrepetible Grupo Norte nacido de esa pléyade incontrastable reunida por José Eulogio Garrido y bautizada, en 1916, por Juan Parra del Riego, en la revista “Balnearios” de Lima, como la Bohemia de Trujillo, en la cual estuvieron, entre otras eminencias, César Vallejo, Ciro Alegría, Luis Valle Goicochea, Domingo Parra del Riego, hermano de Juan, y - en la periferia - su único sobreviviente, Nicanor de la Fuente
Sifuentes (NIXA), quien el venidero 16 de setiembre cumplirá 105 años de edad.
Desde los tiempos de la Bohemia – segunda década del siglo XX – se configura otra característica del periodismo de Trujillo su fraternidad con la literatura que, pasado ese medio siglo, reverdece con los grupos Peña del Mar, Cuadernos Trimestrales y, con mayor énfasis, Trilce y Aramauta, varios de cuyos miembros – como son los casos de Teodoro Rivero-Ayllón, Eduardo González Viaña, Juan Morillo Ganoza, Manlio Holguín Gómez, Andrés Aguirre Lynch y Jorge Díaz Herrera continúan fecundos y plenamente vigentes.
Es conocido que San Martín trajo de Chile una imprenta portátil para sus proclamas y boletines y que Bolívar, por iniciativa de José Faustino Sánchez Carrión, ordenó montar una máquina sobre una carreta para acompañar al ejército libertador unido e imprimir ese beligerante periódico llamado “El Centinela en Campaña”, cuyo primer número fue fechado el 22 de abril de 1824 en Santiago de Chuco., continuándose sus ediciones el 4 de mayo en Huamachuco hasta que la novena y última salió el 14 de julio en Huariaca, Carás. En Huaraz, por entonces, la imprenta itinerante de Bolívar y Sánchez Carrión publicó “El hurón del Norte”,con no menos inflamado espíritu libertario.
Como el tiraje requerido no podía ser cubierto con la imprenta en campaña, el ejército libertador unido se vio precisado a utilizar la imprenta municipal de Trujillo que se había dado abasto para editar otro periódicos patrióticos comenzando por “La Gaceta” sanmartiniana. La más importante, sin duda, fue “El Nuevo Día del Perú” fundado por Hipólito Unanue con sus colegas médicos José María Falcón y Félix Devotti , a fin de continuar la gesta ideológica liberal, peruanista y separatista del “Mercurio Peruano” y contrarrestar las procacidades y mentiras de “El Desengaño” y “El Triunfo del Callao” del gacetillero español Gaspar Rico y Angulo y otros panfletistas de la misma ralea,
posesionados en la fortaleza del Real Felipe.
Rico y Angulo – agudo panfletista y versificador – había iniciado, en Lima, en 1821, sus ataques a la causa emancipadora con “El Depositario”, apologista del virrey Fernando de Abascal, inmediatamente del arribo de San Martín. Parapetado en el Real Felipe, publicó la última edición de “El Depositario” el 01 de mayo de 1825, sacó los otros periódicos y enfiló su artillería contra Bolívar a quien insultaba llamándolo “Señor simoncillo” y “Potroso” .Resultaba, pues, indispensable salirle al paso y Trujillo era, sin duda, el lugar más propicio..
La edición inaugural de “El Nuevo Día del Perú” apareció el primer día de julio de 1824.. El 11 de diciembre de 1824, había salido a las calles para cerrar antes de un año, “El Patriota de Trujillo”,con el lema de “centinela en campaña” que, como queda dicho, fue el nombre del periódico trashumante de Bolívar y Sánchez Carrión .Se estima, no obstante, que fue “El Lince del Perú”, la primera publicación periodística de Trujillo y La Libertad. Sus contenidos traducen una línea ideológica más identificada con la posición de San Martín y su mentor filosófico Bernardo Monteagudo, lo que resulta lícito dadas las corrientes que pugnaban en la naciente república Por esto mismo, estimo coherente que este periódico alentara la toma del poder por José de la Riva Agüero y combatiera al Congreso Constituyente.
Por su trascendencia y por el protagonismo de Unanue, el primer periodista genuinamente peruano, exiliado voluntariamente en Trujillo inmediatamente que los realistas retomaran la capital del virreinato, es menester una revisión panorámica de tan trascendental publicación patriótica, sobre la base de la minuciosa descripción que ofrece Carlos Camino Calderón, quien confiesa haber tenido delante la colección completa del periódico. Por él sabemos que“El Nuevo Día del Perú” fue una publicación hebdomadaria con prospecto de doce ediciones, la primera el 01 de julio y la última, el 25 de setiembre de 1824. Sobre su logotipo aparecía un ave fénix renaciendo de sus cenizas. Camino Calderón subraya la importancia histórica y social de este periódico “en una época en que, por las continuas traiciones, parecía imposible la reacción del Perú”.
Gracias a estos apuntes de Camino Calderón, conocemos que Unanue, Falcón y Devotti, iniciaron su gesta periodística reconociendo que, por su vejez e inutilidad para tomar las armas, sólo podían servir con la pluma a la causa de la independencia. Esto justifica la publicación, desde el primer número, de un “Cuadro histórico de la Revolución del Perú” reseñando las jornadas libertarias que siguieron al desembarco de San Martín ( 8 de setiembre de 1820 ) hasta la pérdida patriota en el Callao de la fortaleza del Real Felipe, ocurrida el 5 de febrero de 1824.
Gracias a la descripción de las doce ediciones. de “El Nuevo Día del Perú” que ofrece el ilustre escritor trujillano en su opúsculo de “Tradiciones de Trujillo”, es posible
resumir sus contenidos y tipificar su .ideología patriótica, humanista y libertaria.
En la segunda edición hay una apología a Simón Bolívar y textos proféticos respecto a la victoria de Junín; en la tercera, se pone énfasis en la necesidad de una nueva educación en los territorios libres y aparece una viril respuesta a los gacetilleros del Real Felipe junto con cartas que desmienten versiones adversas a la campaña del ejército libertador unido a lo largo de la cordillera.
Otros periódicos liberteños, antes de 1879 –
Fuente: Historia del periodismo Peruano- Carlos Miro Quesada Laos
• Balanza (1850)
• Cajabambino
• Constitucional (1825-1826)
• Club liberal (1861)
• Diario (1846-1847)
• Eco oficial (1855)
• Gaceta (1849-1850)
• Ilustración(1871)
• Imparcial (1873)
• Libertad restaurada (1854-1861)
• Nuevo día del Perú(1824)
• Porvenir (1870-1879)
• Quipus de Chimú (1833)
• Tribuno (1871)
• Termómetro de la opinión (1834-1835)
• Redactor (1838-1841)
• Registro (1852-1879)
La Industria de Trujillo
La Industria de Trujillo posee una historia llena de lauros. Su pluma se mantiene inquebrantable en beneficio de los lectores y de la región la libertad.
El cumplir 113 años no significa que seamos un diario viejo. Para nada. Más que viejos, somos expertos. Pues sí, con el correr del tiempo, La Industria de Trujillo le ha demostrado a sus lectores que su fin primordial es la búsqueda de la verdad.
Una tarea nada fácil que se inició con humildad un 8 de noviembre de 1895 y que –en base al esfuerzo de sus propietarios y al compromiso de sus periodistas y trabajadores– ha convertido a La Industria de Trujillo en el diario serio de mayor lectoría en esta ciudad norteña.
Teófilo Vergel, natural de Salpo (Otuzco) y el cajabambino Raúl Edmundo Haya Cárdenas (padre de Víctor Raúl Haya de la Torre) fueron los fundadores de la ‘Empresa Tipográfica Grau y Cia’ la cual se encargó de publicar el primer e histórico número de La Industria de Trujillo (que empezó como semanario, luego se convirtió en vespertino y finalmente en el actual matutino).
Aquel ejemplar, impreso en un modesto taller ubicado frente del actual Club Central (el jirón Pizarro en aquel entonces se llamada ‘calle Progreso’) acuñó en su presentación una frase que hasta nuestros días marca la pauta del periodismo que practicamos: “La Industria [proporcionará] una fiel y descarnada información de los acontecimientos más importantes, comprometiéndose con sus lectores de que en sus páginas no tendrá cabida la política partidarista”.
El piurano Miguel F. Cerro, con estudios de derecho y jurisprudencia en la Universidad Nacional de Trujillo y en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, al ser un hombre visionario y tener sangre de periodista, confió en la empresa y en el año 1900 logró comprar el 100 por ciento de las acciones de La Industria.
Desde entonces, el desarrollo de la actual Empresa Editora La Industria de Trujillo S.A. ha ido cuesta arriba. El diario, al poco tiempo, se trasladó a una casa ubicada en el jirón Diego de Almagro (en plena Plaza de Armas) y luego, en 1945, se mudó a su propia casona del jirón Gamarra 443 (donde funciona actualmente).
En 1969, cuando el hombre conquistó la luna, en Trujillo nació el vespertino Satélite, como una alternativa para los lectores que –con el tiempo– se ha convertido en una verdadera tradición.
En la actualidad, la Empresa Editora La Industria de Trujillo S.A. es dirigida con habilidad por María Isabel Cerro Moral Vda. de Burga (Gerente General) y María Ofelia Cerro Moral (Presidenta del Directorio). Completan el Directorio el doctor Fernando Vidal Ramírez, Gonzalo Sandaza Cerro, en representación de su madre Susana Cerro Rinkler, José Enrique de la Borda Cerro y el abogado Fernando Ferrando, en representación de María Isabel Cerro Rinkler.
Rediseño, una historia aparte
El 11 de junio de 2006 se escribió un nuevo capítulo en la historia de La Industria. Aquel día el diario circuló rediseñado, bajo una filosofía de modernidad gráfica y calidad de textos. El trabajo previo fue arduo y lo ejecutó la prestigiosa consultora americana García Media, mundialmente conocida.
El 11 de junio de 2006 se escribió un nuevo capítulo en la historia de La Industria. Aquel día el diario circuló rediseñado, bajo una filosofía de modernidad gráfica y calidad de textos. El trabajo previo fue arduo y lo ejecutó la prestigiosa consultora americana García Media, mundialmente conocida.